Adolfo Bioy Casares
¿Por qué existe la necesidad de trascender más allá de la muerte? Pensar en la nada provoca un vacío tan espantoso que algo tenemos que inventar para llenarlo, para preservarnos aunque en el futuro no haya ningún testigo de que alguna vez estuvimos ahí. Morel decide hacer justamente eso en una isla abandonada, abandonada por el resultado del objetivo de la máquina. El objetivo era preservar una copia exacta de un momento específico, con todos los sentidos satisfechos, y la máquina funcionó tan bien que terminó por absorber el alma misma de las personas a las que copiaba, consumiéndolas. La realización misma de la eternidad no permitía la continuación de la vida; es la pregunta del árbol que cae en medio de la nada y si nadie lo escucha, ¿hace ruido?.
Si no hay testigos humanos de nuestra eternidad, ¿vale la pena ser eternos?, ¿no es eso otorgarle características humanas a lo inanimado y pensar que al mundo le importa que estemos aquí y que perduremos? como si no pudiera sacudirnos en algún momento que se harte de nosotros (nótese que hago uso de la misma figura retórica que acabo de describir, lo que me hace pensar si realmente podemos comprender el mundo desde otro lugar).
Preservar, cuidar, trascender es parte muy importante de la cultura humana, porque sin historia no hay cultura y, por lo tanto, nada que preservar y cuidar, pero si la trascendencia implica la muerte, no sé cuántas personas elegirían "la vida eterna".
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